El maestro subió a la montaña y la gente lo siguió. Se sentaron en un claro, el maestro en una roca y la multitud alrededor de él. Las personas se mostraban excitadas y seguro estaban llenas de preguntas, cuando comenzó a llover.
-Maestro, hablanos de la lluvia- El ermitaño miró al cielo, sintiendo las gotas que resbalaban por su cara, lentamente y con modulando su voz para que todos lo escucharan dijo:
-Dejemos que sea ella la que nos hable.
Entradas
3 comentarios:
Neli se sentó anoche a escuchar la lluvia desde su balcón, le dijo que todo iba bien y lavo con sus gotas frías su nostalgia...
Me gustó tu última entrada.
Además, me hizo sonreír porque yo creía conocer la mujer con mayor cantidad de citas de Los Simpsons por minuto. Ella también sonríe cuando digo: 'crédito Pepsi'.
Sheldon es la onda.
Esta publicación en especial me ha recordado bastante El Profeta de Gibran Jalil Gibran, o como sea que se escriba ¬¬
Sigo leyendo... solo que no comento tanto como tú.
Publicar un comentario