martes, 29 de enero de 2008

Ensayo sobre el sujeto contemporáneo

Hablar sobre el sujeto contemporáneo me hace hablar acerca del sujeto del cambio y el grupo social encargado de eso en esta y muchas sociedades en general es el joven. Por que el joven es el sujeto rebelde por excelencia que se opone a las figuras de poder y todo lo que estás representan. Así deja de lado gran parte de la herencia familiar, educacional y social que haya adquirido a través de los años y forma una nueva y propia forma de ver la vida. Nuevos valores, nuevas formas de pensamiento y produce un cambio.

Yo quisiera hablar del joven desde un punto de vista mundial. Comentar de los jóvenes mexicanos así como de los que viven en Europa, en Asia y cualquier otro lugar, pero la realidad es que me resulta más lógico y conveniente limitarme a lo que conozco desde un punto de vista directo. Por eso lo más seguro que puedo proponer es mi propia observación del sujeto contemporáneo en mi sociedad, limitándome a mi país, mi estado y tal vez incluso solamente a las ciudades en las que he radicado unos cuantos años de mi vida (tratando de que esto sirva para dar un ejemplo de un panorama general de la situación en nuestro país).

Es cierto que hoy en día tenemos acceso a medios de comunicación que nos permiten ver una cantidad enorme de aspectos de vida en tantos lugares y países. El Internet y la televisión actual nos dan paso a conocer tantos aspectos culturales de lugares tan ilimitados como ilimitado sea nuestro lenguaje. Yo sólo conozco el español en una proporción medianamente amplia y el ingles de una manera un tanto limitada. Por lo que sólo puedo hablar de lo poco que he conocido acerca de los países de habla latina como son Chile, Argentina, Perú… así como un poco de España, Estados Unidos de Norteamérica y alguno que otro país. Pero nunca de la manera que conozco los aspectos sociales que presencialmente vivo, formando parte activa de mi comunidad. He vivido por un período mayor a un año en tres ciudades del estado, es decir, Guanajuato, Celaya y ahora León. Por lo que me limitaré a hablar lo conocido en estos tres lugares y no divagar de forma arriesgada en aspectos ajenos a estos tres lugares que bien podrían ser una falsa aseveración.

Como dije en un principio hablar del sujeto contemporáneo es hablar del joven contemporáneo. De lo que es este joven en realidad y me parece que para eso sí estoy calificado a hablar dado el caso que yo soy parte de esta población. Actualmente podemos observar un cambio demasiado abrupto en comparación a generaciones anteriores a la nuestra. Con la globalización, el acceso a la educación y el conocimiento, así como los cambios ambientales, sociales y tantos aspectos que valdría la pena considerar, estamos viviendo una transformación bastante rápida en poco tiempo.

Creo que deberíamos tomar en cuenta la influencia que vivimos del país del norte, de los Estados Unidos de Norteamérica. Por una parte, recibimos gran parte de su mentalidad mediante sus formas de diversión. Importamos casi todos los programas de televisión (caricaturas, series, deportes, talk shows, reality shows, etc.) de ese país. Recibimos gran parte de su música con brazos abiertos. El idioma ingles (más exactamente el ingles hablado en U.S.A.) se hace parte básica de la enseñanza en nuestro país por la necesidad de negociar y radicar al otro lado de la frontera. Así como el cine, literatura, páginas web y tantas otras cosas que nos llegan a las manos que sería absurdo pensar que no estamos influenciados por dicha nación.
A la vez podemos apreciar como una gran parte de ese conocimiento se va depositando en las mentes de nuestros jóvenes. Uno de los aspectos que me parece más importante comentar sería la denominada vida “Light”. La mentalidad Light consiste envivir ligeramente (precisamente la palabra significa ligero). Tenemos las dietas por ejemplo, que a cada momento nos hacen ser más partes de esta cultura (y es que ya somos el segundo país más obeso en el mundo). Pero no creo que eso nos afecté de tal manera como es la mentalidad Light como tal. Cada vez vemos las cosas con más ligereza incluso los aspectos más fundamentales del individuo. Nuestros valores, nuestras metas, nuestros sueños son cada vez más ligeros. Lo que antes era lo más importante ahora es sólo un accesorio más.

Para tomar un primer punto podemos hablar de la vida espiritual. México se ha dado a conocer al mundo como un país ampliamente católico, pero podemos observar que cada vez más son los jóvenes agnósticos, ateos o que simplemente no ejercen una religión por el simple hecho de que dudar de algo tan importante se ha vuelto cada vez más fácil. Antiguamente se te califica de hereje. Ahora, la religión no deja dinero, por lo que no es algo trascendente en este mundo cada vez más capitalizado. Como dice el padre de la parroquia que acostumbro, hay 500 bautizos y sólo 4 matrimonios en un año. Sin decir que los templos cada día se ven más vacíos. Por que ahora lo importante es el Zumba, el Feng shui, los horóscopos, el tarot, la mentalidad New age, entre otras cosas que nos reflejan la espiritualidad que se viene reflejando en estos tiempos.

Como dije antes el capitalismo se va haciendo cada vez más grande y eso también es una realidad social y una mentalidad que nos va llegando del extranjero. Cada vez importa más el dinero, pues la adquisición de bienes de mayor calidad y cantidad son bases para reflejar nuestro éxito profesional y social. Anteriormente una persona podía morir por defender una idea, actualmente una persona puede morir por defender su patrimonio. Y a cada momento se siguen abriendo más malls y negocios en cadena, desgraciadamente de propiedad extranjera. Si en las generaciones anteriores era común ir al tianguis, al mercado o a la tiendita de la esquina, en nuestros días podemos notar que se van supliendo por el mall, el supermercado y los minisupers, siendo los oxxos los más populares en estos últimos.

También podemos hablar de la sexualidad (por que hay mucho de que hablar respecto al sujeto contemporáneo y es difícil abarcar todo lo que quisiera decirse al respecto). Las prácticas siguen siendo la misma pero antes “se hacía más a escondidas, ahora se hace en plena calle y a la luz del día”. Creo que para nadie es extraño que cada día salen las personas más descubiertas. Tanto del cuerpo como en su lenguaje. Las minifaldas, los tops, la ropa pegada y el hablar del sexo viene siendo el pan de cada día. Y pareciera que en lugar de que las generaciones anteriores se mostraran fuertes en cuanto a al uso de las ropas acostumbradas se estuvieran ellas adaptando a lo que los jóvenes vestimos. Cada día es más común mirar a personas de treinta y tantos o más años con el cabello pintado, piercings, tatuajes, mostrando el ombligo o con un escote demasiado provocativo. Pero no sólo en la ropa está la sexualidad al descubierto.

En las escuelas y centros de salud cada vez es más y más común que se tengan pláticas de sexualidad. El kamasutra ya no es un libro tan exótico y nuestra vida sexual cada vez se va haciendo más evidente. Actualmente ignoro el dato exacto, pero me parece que en la última encuesta el promedio para que un chico mexicano hubiera perdido la virginidad era a los 17 años, en el caso de la mujer 19. En un nivel más personal, puedo decir que a cada momento se vive una falsa presión social por evitar el deseo sexual y los encuentros del mismo tipo. Mientras que la presión de los amigos y jóvenes en general nos llevan a ejercer una sexualidad activa cada vez a una menor edad. Con deseos de equivocarme puedo afirmar que el estado de Guanajuato cuenta con la mayor cantidad de embarazos en jóvenes a nivel Nacional, así como la ciudad de León con la mayor cantidad de personas infectadas con VIH.

También podríamos hablar del consumo de alcohol, tabaco y drogas. Por ley los dos primeros están prohibidos a las personas menores de edad, pero lo cierto es que desde los 14 años yo he podido comprarlas sin mayor complicación. El alcoholismo se presenta cada vez en edades más tempranas. Teniendo casos críticos de chicos de 11 o 12 años que ya son alcohólicos. Las fiestas que anteriormente sólo eran tardeadas y se basaban en la simple convivencia, ahora tienen por regla general el alcohol de por medio, sin importar si se trata de fiestas de adultos, de universidad o de preparatorias. En este momento no puedo ni siquiera recordar una sola fiesta en la que no haya habido alcohol de por medio (ni siquiera una fiesta infantil).

En cuanto al consumo de tabaco, si consultáramos las estadísticas también podríamos ver a simple vista que va en aumento. Cada vez somos más personas que sin pensarlo entramos en una de las adicciones más mortíferas. El tabaco es más adictivo que la heroína y la cocaína. Pero no es tan satanizado. Como prueba tenemos la renuencia que ha habido a la nueva ley antitabaco por creer que eso va en contra de la libertad individual de los fumadores. Y cada vez son mayor la cantidad de métodos para dejar de fumar, tanto cursos como parches, así como los nuevos filtros o los chicles de nicotina.

También recuerdo que hablar de drogas no sólo era algo que sólo pasaba en las películas sino que uno no pensaba en ellas sino como en China… Es decir que antes eran tan lejanas. Me ha tocado estar en fiestas de jóvenes tanto en preparatoria como en universidad donde por lo menos ha habido marihuana de por medio. Un amigo mío fue adicto a la “piedra”. Otro me invitó en alguna ocasión a consumir cocaína. En un concierto de música popular durante el cervantino, me tocó ver a más de una persona drogándose. Hace poco escuche decir a un consumidor que desde el nuevo gobierno (el de Felipe Calderón) las drogas son cada vez más difíciles de conseguir.

Por otro lado, podemos hablar de los medios de comunicación. Por ejemplo la música. Con sólo encender la radio podemos notar que ha cambiado mucho. Tenemos nuevos géneros como el regueton, el pasito duranguense, el hip hop, el ska, el punk, emo y tanto otros que tal vez no sean tan nuevos en sus lugares de origen, pero ciertamente son muy diferentes a lo que escuchábamos hace un par de años. Podemos notar que muchos de estas nuevas canciones reflejan gran parte de nuestra realidad social. El regueton es la base de un nuevo tipo de baile excesivamente erótico, además de que las letras de sus canciones y sus videos nos reflejan una sexualidad preocupante. La mujer parece ser un objeto más, que se contonea de manera sensual y puede ser un premio. Además de que los ritmos y complejidad de mucha de esta nueva música es muy simple. Ya sea que el ritmo sea binario o por que un solo hombre con un teclado o un sintetizador puede hacer toda la melodía que anteriormente se hacía con mínimo unos tres músicos. Para una prueba de esto está la música electrónica que en cualquier “antro” podemos escuchar, donde un ritmo monótono marca el ritmo y la letra puede ser una tonadita tan simple como un “destination un know”, “one more time”, “lady”…

La televisión no se queda atrás. En primer lugar podemos ver que en casi cualquier hogar mexicano hay por lo menos una televisión y que como bien decían en el programa de picardía mexicana hace unos años “el día comienza cuando sale el sol y se acaba cuando se apaga la televisión”. El problema no es el ver la televisión. Los noticieros (aunque sean un poco tendenciosos) nos mantienen informado de lo que pasa en México y el mundo. Hay documentales como los de Discovery Channel, la BBC, History Channel en los que se gastan millones y realmente están bien documentados. El problema radica en que lo que los mexicanos vemos son programas cada vez más decadentes. Las caricaturas actuales reflejan cada vez más violencia y menos valores. Incluso mayor cantidad de antivalores que antes eran impensables. Existen por ejemplo caricaturas para adultos como los bloques de “Adult Swim” en Cartoon Network (un canal que siempre ha sido para niños) o “No molestar” en Fox, así como caricaturas en MTV como South Park o Daria que han sido planeadas para adultos pero que debido a sus horarios son fácilmente accesibles a los niños actuales que cada vez duermen más tarde (por dar un ejemplo el bloque de no molestar se nos presenta de las 8 a las 10 de la noche, horario en que los niños aún siguen despiertos). Además de otra cantidad enorme de programas que bien podríamos catalogar como basura, como son los talk shows, los reality shows, los nuevos programas de concursos que cada vez son menos exigentes (pasamos de un programa como jeopardy donde se premiaba el conocimiento a un programa como “doble cara” donde sólo se necesita engañar a los demás participantes y el conocimiento es algo secundario) así como las telenovelas que tienen una formula ya pre-establecida que se viene repitiendo durante años.

No sólo el que se vea tanta televisión es preocupante, sino también el hecho de que la información de que se lee cada vez más poco (y lo que se lee en general no vale la pena). Según un estudio efectuado hace unos cuantos años el mexicano en promedio lee 0.4 libros al año, siendo que en la escala propuesta en ese estudio las categorías se presentaban de la siguiente manera:

Libros leídos al año Categoría
0-4 No lector
5-10 Lector pobre
11-25 Lector
26 en adelante Muy lector.

Además de que la televisión tiene tantas desventajas respecto al medio escrito, por ejemplo:

-La información no tiene tiempo de ser asimilada por la cantidad y la rapidez con que nos la presentan.
-La cantidad de escenas violentas que podemos ver en un solo día de ver televisión es enorme (ya sea en caricaturas, telenovelas, noticieros…)
-Se nos presenta una amplia gama de antivalores que cada día se van volviendo parte de nuestra cultura.
-En general la televisión exagera la realidad unas 10 veces más de lo que es en verdad.
-Se han registrado ataques epilépticos causados por la televisión así como los problemas visuales causados por verla en exceso o en condiciones inadecuadas.

Mientras que la lectura regular de textos de calidad nos presenta ventajas como:

-La mejora en la capacidad de pensamiento abstracto (mientras en un medio visual como la televisión sólo podemos tener conceptos iguales a una imagen, en el medio escrito tenemos conceptos que tienen que “verse” con el pensamiento abstracto, como la libertad por ejemplo, a la que es imposible ponerle una imagen exacta)
-Leer desarrolla nuestra imaginación.
-La lectura te da cultura y conocimiento.
-Hace trabajar secciones del cerebro que no están presentes en otras actividades regulares.
-El leer continuamente suele favorecer a tener una mejor ortografía.

Y podemos continuar aumentando ambas listas haciendo más preocupante el desarrollo cada vez más evidente del “homo videns”. Bien dicen que la educación no se recibe, sino que se mama. No podemos pedirle al mexicano que se ponga a leer y vea menos televisión si tomamos en cuenta que desde la escuela (y en general) nos hacen ver la lectura como un trabajo obligado y tedioso que se tiene que realizar como una obligación y por los beneficios que nos presenta. Además de que la televisión viene a ser algo básico en cada hogar y muchas personas la usan como niñera, haciendo que el niño desde muy pequeño se acostumbre a estar demasiado tiempo expuesto a la denominada “caja idiota”.

Por su parte la literatura también se ha visto afectada por la vida Light, es cierto que aún hay personas que leen, pero también es cierto que lo que leen no siempre es algo de tan buena calidad. La gente se queja de que los libros son caros siendo que se puede encontrar clásicos como Dostoievsky, Robert Louis Stevenson, Víctor Hugo, Shakespere, entre otros a un precio no mayor a 50 pesos. Mientras que los libros más caros como son los best sellers “El código da Vinci”, “Harry Potter”, “Juventud en Extasis”, “El manual de la perfecta cabrona”, “como ser un huevón en la vida…” que oscilan entre los 150 y 300 pesos son como su nombre lo indica mucho muy vendidos, mientras que su calidad como obras literarias puede ser ampliamente cuestionables. Ni que decir de las personas que se dedican a leer revistas como TVNotas, Fama, donde se nos muestran escándalos tras escándalos de nuestros “artistas” con la “obligación” de informarnos de su vida privada que en lugar de ser privada parece más un circo romano. Mientras en revistas como Cosmopolitan o Quo, cuyo prestigio es mayor nos filtran de una manera bastante sutil una cultura ajena a la nuestra, sobre todo en cuanto a sexualidad se refiere, donde a cada momento es algo más común prácticas antes “prohibidas” como el sexo premarital, el uso de juguetes sexuales, entre otras cosas, es decir que no se limitan a informar sino a fomentar cosas que anteriormente no veíamos como las relaciones de una sola noche, el sexo anal, los clubs swinger (que son éticamente muy cuestionables para nuestra sociedad).

Por ahora me he limitado a hablar de influencias que mayormente nos llegan del país del norte, pero el espectro debería ampliarse más con todo lo que nos está llegando. Productos de países antes tan exóticos como Japón o China. A cada momento es más fácil ver productos procedentes de China, por suerte su mentalidad todavía no nos ha penetrado tanto. Mientras que por ejemplo Japón nos exporta anime, videojuegos, productos electrónicos y lentamente vamos teniendo a muchos jóvenes que cada vez se van enajenando más de nuestro país al grado de vestirse como los personajes de las animaciones de ese país, usar lenguaje en japonés o adoptar costumbres típicas del país de oriente, incluso deseando haber nacido en aquella nación.

Puede que me haya enfocado en mostrar el lado negativo de las cosas, pero en realidad solamente quise llamar un poco la atención en lo que yo observo. No necesariamente todo lo que nos propone el sujeto contemporáneo es algo negativo, pero en general me parece muy cuestionable. Creo que el error está precisamente en catalogar algo como negativo o positivo con un simple juicio. Actualmente vivimos con nuevos paradigmas que suelen ser muy sencillos como 2+2=4, un ejemplo rápido y sencillo de esto es Avance Tecnológico = Bueno, otro Estados Unidos de Norteamérica = Mejor que México. No nos damos cuenta de que a cada momento estamos pensando menos y dejándonos llevar por la vida actual. Compramos productos y adoptamos costumbres sin ver si en verdad los necesitamos o que efecto pueden tener sobre nosotros. Sin frenarnos a pensar sólo un momento en si en verdad los necesitamos o sólo nos hacen creer eso. ¿Por qué todo el mundo tiene un celular en su bolsillo? ¿Por qué para platicar tienes que ver el programa que todos vieron el día anterior? ¿Por qué tienes que escuchar al grupo, ir al antro o comprar el best seller de moda? Y la pregunta que me gustaría proponer es ¿Alguna vez tendremos un momento para detenernos a pensar que es lo que realmente importa? Por que pareciera que la base de la sociedad actual fuera el constante movimiento y nunca sentarnos un momento y reflexionar un poco si es que en verdad manejamos nuestra propia vida. Tan sólo deberíamos darnos un tiempo para poder emitir un juicio de lo que sucede a nuestro alrededor y no tragarnos todo lo que se nos presenta “peladito y en la boca”.

sábado, 26 de enero de 2008

Improperios

Hoy me permito hacer lo que otros días no hago y es escribir sin un fin específico. Si estuviera escribiendo para alguien en especial. Lo estoy haciendo, estoy pensando en ti. Pues sucede que estoy deprimido. Quiero pensar que es por que me he sentido solo a causa de pasar mis días tan tristemente abandonado en mi habitación rentada. Quiero pensar que es por la falta de sueño, la mala alimentación y los excesos. Quiero pensar que estoy deprimido por causas orgánicas. Por problemas en mis hormonas. Pero estoy seguro que algo tiene que ver contigo. No sé, hay días en que realmente quisiera que fueras la persona en mi vida. Pero ya queda más que claro que no es así. Creo que eso es lo que duele tanto.

Te lo digo y lo repito, tengo la vida ante mis pies. Estoy seguro de a donde voy y que quiero lograr. Sueño con mi doctorado, la publicación de mis libros, ser esa gran y enorme persona. Sueño a tirarle a lo grande. Pero a cada día que pasa me queda más en claro algo. Todo lo que haga, todo lo que logre y todo lo que llegue a hacer no me llena a menos que tenga a alguien con quien compartirlo. Tengo muchos videojuegos, películas, música, libros y todos están esperando a alguien que los juegue, que los vea, que los escuche y los lea… Lo que quiero decir es que, un amanecer es hermoso, pero sólo es realmente hermoso cuando lo compartes con alguien y yo. Yo no tengo con quien compartirlo.

Me falta esa pasión y lo he notado ya en cada aspecto de la vida. Una vez resueltas mis necesidades básicas no hay ninguna otra pasión o urgencia que me mueva a hacer algo más. Es cierto, tengo un gran deseo de aprender y moverme en la escuela; pero no tengo amor, no tengo a quien amar y mi vida pierde todo sentido después de eso. En esos momentos es cuando se siente la soledad. La soledad no la hace el que no haya ninguna persona alrededor mío, más bien lo hace el que no esté una única y especial persona cerca de mí.

Lo peor es que noto que quien me rodea no es para mí, al menos así lo creo. No siento la pasión, no siento las ganas de hacer todo lo que está en mi mano por estar con la otra persona. No siento que esté haciendo el amor. Simplemente no siento nada. Me siento terriblemente solo y lo único que puedo hacer es fumar, masturbarme y seguir viviendo día tras día sin que nadie note como me siento. Si pudiera gritar… un grito de ayuda.

Pero todo queda en silencio. No quiero causarte más problemas. Me acuerdo de ti y me duele. Quiero estar cerca y bien sabes que yo soy una persona alegre, viva, brillante. Pero cuando reapareces… Creo que no puedo estar cerca de ti sino es amándote. Por eso me duele, por eso no resisto que me cuentes acerca de “eso”. Por eso no he visto aquella película desde entonces. En verdad que se siente horrible quererte y ver que eres lo más cercano al amor de mi vida. Y ver que a fin de cuentas no estás conmigo.

Disculpa que a cada momento lo saco a colación, que si yo te dije que te amaba hace tanto, que si tú me pediste que te buscara. Y a fin de cuentas sólo terminamos en problemas. Por eso, ya no sé que hacer contigo. A cada momento me deprimo más conforme no hablamos y cuando hablamos tal vez es peor. En fin, creo que este amor ya está más que prostituido así que no queda más que recoger los pedazos y llevarlos a casa.

Bebésos

viernes, 25 de enero de 2008

El hombre de la guitarra

Alguna vez leí en algún lugar una historia acerca de un hombre atrapado en los campos de concentración Nazi, la historia va más o menos así:

En los tiempos de la segunda guerra mundial, en un campo de concentración se vivía la opresión Nazi, a tal grado que los judíos se sentían completamente deprimidos. Un día en uno de los patios apareció uno de ellos con guitarra en mano y comenzó a tocar una bella canción con tal pasión que los presentes comenzaron a cantar con él. En poco tiempo los soldados alemanes fueron a ver que era lo que estaba sucediendo y al ver al hombre le quitaron su guitarra, la lanzaron contra el suelo quebrándola, quedando esta destrozada.

Al día siguiente el mismo hombre acudió al patio y volvió a cantar su canción, esta vez llevando el ritmo por medio de aplausos y la gente nuevamente comenzó a cantar con él. Pero los soldados no podían permitir esa situación, por lo que se llevaron al hombre, le cortaron ambas manos y sabiendo que no volvería a aplaudir lo dejaron en su celda.

Pero hubo un nuevo día y como los anteriores el hombre acudió al patio, esta vez únicamente con su voz reinició la canción por tercer día y las personas de nuevo se sintieron felices al grado de cantar con él y ser ellos los que llevaran el ritmo con sus palmas. Pero los soldados por tercer día regresaron y se llevaron al hombre. Le cortaron la lengua seguros de que esta vez el asunto quedaría resuelto.

El cuarto día el hombre volvió a salir al patio para estar junto a toda su gente. Silenciosamente se sentó en el suelo y comenzó a moverse de un lado a otro llevando el ritmo de aquella canción que ahora había quedado sin guitarra, sin aplausos y sin voz. Y la gente volvió a animarse, llevando el ritmo con él, moviéndose la multitud al parejo. Todos en una silenciosa canción que levantaba el espíritu de todos aquellos que todo lo veían perdido.

La historia había quedado ahí, almacenada en mi memoria como un breviario cultural más. Hasta hace un par de días que regresó momentáneamente a mi recuerdo. ¿Qué significado podría tener esta historia? El mensaje es sencillo, todos deberíamos ser como ese hombre, que por la motivación que tenía de mandar un buen mensaje a todos lo hizo aún sin manos ni lengua. Pero ahora que lo reflexiono un poco más a fondo, no es la única lección que podemos tomar de la historia.

Yo me pregunto ¿y cuantas veces no he sido yo como los Nazis de la historia? Me avergüenzo de mí mismo al pensar que fueron muchas más que las que yo hubiera querido. Muchas veces me he visto en la situación en la que alguna persona tiene esa alegría, ese entusiasmo, esa chispa de vida y yo, como agente de la sociedad actual, le digo que no debería de ser tan feliz.

¿Has escuchado alguna vez la expresión “demasiado feliz”? Probablemente la hayas escuchado en Patch Adams, aquella película con Robin Williams. Para quien no la haya visto, está basada en una historia real. Trata de un estudiante de medicina que propone que a los pacientes se les debe dar un trato más humano, si es posible, hacerlos reír para que se sientan mejor a pesar de sus enfermedades. El problema es que el decano de su facultad cree que Patch (el estudiante del que hablo) está loco, pues el médico no debe ser en ningún momento como cualquier ser humano. De la escena a la que me refiero, es cuando Patch mira su expediente y lo catalogan como alguien “demasiado feliz”.

Cuando yo la vi dije “es que ese doctor está loco” ¿cómo alguien puede ser demasiado feliz? Ahora, años después me doy cuenta que más de una vez yo he dicho lo mismo. Por lo que yo veo todo se debe a la vida actual, es decir, que nuestra vida es tanta producción, tanto desarrollo, tanta tecnología, tanto movimiento que no podemos darnos el lujo de ser felices. De esa manera la persona que es feliz es por que está perdiendo tiempo. La única manera de ser feliz debería ser cuando una persona ha trabajado tanto que tiene millones, éxito empresarial y profesional. No por algo tan simple como estar vivo.

Regresando a los Nazis, les decía que yo en más de una ocasión me he portado como uno y hasta el día de hoy me estoy dando cuenta de ello (afortunadamente sólo tengo 20 años, probablemente pueda enmendar ese graso error). Han existido personas como Andrea, mi exnovia que quiso estudiar psicología en la Universidad de Guanajuato y yo sin tener el tacto necesario (por que soy “demasiado honesto) le dije que lo que hacía estaba mal, presumiéndole mis éxitos en la misma empresa (yo también presenté en la misma carrera) y criticando sus errores, sin pensar ni siquiera un momento en el daño que hacía al no darme cuenta de que en verdad no tengo la menor idea de lo que es ser ella.

Mi primo Emilio también fue mi victima, cuando era pequeño era “demasiado” feliz, activo y cariñoso. Siempre quería estar conmigo (por alguna razón, suelo ser muy querido por los niños) y yo no se lo permitía. Aún en estos últimos días cuando ya es un adolescente no me tomo la molestia de contestar sus mensajes, de visitarlo y jugar un rato con él. Sin darme cuenta poco a poco contribuí a matar su espíritu de niño.

Con Alex, mi otro primo (quien lleva el mismo nombre que yo, como una especie de homenaje a mi persona) pasa casi lo mismo. No lo visito, no le hablo y nunca quiero jugar con él. No quiero pensar que puede pasara el día de mañana cuando el tenga su primer novia, su primera relación sexual, su primer auto, su primer trabajo… Y no me lo diga, por que piense que a mí no me interesa.

¿Mariana? ¿Qué puedo decir de la Bebé? Fui el amor de su vida, en verdad me quiso como yo nunca tuve una idea. ¿Y yo? Yo sólo estaba solo y quería tener con quien “divertirme”. Nunca me di cuenta del costo de lo que estaba tomando. Ella me daba tanto amor y yo sólo le di mi calentura, mi estúpida calentura de adolescente. Un día sin más ni más me desaparecí de su vida, sólo para molestarla años después (y aún quejarme de que no me quiere demasiado)

En estos momentos también pienso en Claudia. Probablemente haya sido la mujer que más me haya querido en esta vida. Y nuevamente erré en no darme cuenta de ello, aún peor, en no querer darme cuenta de ello. Ella llenaba mi vida (ahora tan vacía desde su partida) y yo pensaba que en realidad estaba invadiendo mi espacio. Ella hacía el amor y yo sentía que era sólo sexo. Ella me amaba y yo la quería. Estoy seguro que el día que le dije “no quiero volver a verte” soplé demasiado fuerte en la llama de felicidad en su vida. Me duele pensar que mañana estará peor gracias a mí. Afortunadamente, ella aún es muy buena y aún me ama. A pesar de todo.

Mi hermanita… (Por adopción mía, pues oficialmente no somos de la misma sangre”… comenzamos como amigos, pero ya es mi hermana) ¿Les he contado acerca de ella? Es una niña hermosa, ella es la viva imagen de lo que significa ser “demasiado feliz”. Diario tiene una sonrisa para iluminar todo a su alrededor. Pero en verdad, es que siempre tiene una sonrisa. Y yo fui tan egoísta con ella, pensando que me necesitaba para resolver sus problemas. Que en verdad era tan dependiente que me necesitaba para resolver todos sus problemas. Recuerdo cuando le robaron todo y yo con una estúpida actitud tipo “ahora vuelves arrastrándote con la cola entre las patas”. No me di cuenta del privilegio que yo tenía en ser su hermanito. En que confiara tanto en mí para pedirme favores que no a cualquier persona le pediría. No me di cuenta que vale más una amistad que 100, 200, ¿500,000,000,000? pesos… Gracias a Dios, sigo siendo su hermano, que francamente estos días estaría perdido sin ella.

Ernesto, mi mejor amigo de todos los tiempos. Por dios lo único que me faltó para ser la persona que más lo ha lastimado fue haber sido mujer (y su novia). Siempre pensando que mi vida es más importante que la suya, que yo soy más listo, más inteligente, mejor con las palabras, mejor con las chavas y nunca me daba cuenta que es la persona con el corazón más puro que he conocido. Que a pesar de todo, siempre está para uno. Que cuando el ha tenido tantos problemas yo siempre he estado ocupado. Pero para pintar mi casa, conformarte cuando nos robaron (casi 60 mil pesos en menos de 5 minutos), para hablar acerca del amor de mi vida, para hablar acerca de cualquier tontería que me pasaba; el siempre estuvo ahí, junto a mí apoyándome. Y yo sin tomarlo en cuenta.

Y Jorge, no puedo escribir todo esto sin mencionar a Jorge. El ha sido mi mejor amigo (él, Ernesto y yo, siempre los tres. No puedo pensar en uno sin el otro) de una forma que nunca nadie había sido conmigo (ok, sólo Ernesto). El me enseñó tantas cosas de forma tan sutil que hasta ahora, años después me doy cuenta. Gracias a él aprendí una de las habilidades más grandiosas que he conocido (siendo él mi ejemplo) la cuál es resolver problemas. Él siempre ha tenido una respuesta para todo, para todo y no exagero. Si el se lo propusiera te aseguro que podría armar una antena satelital con un tenedor y un pedazo de papel aluminio. En verdad, que nunca me di cuenta que a cada paso del camino que recorría junto a ellos aprendía a ser como él. Ser una de esas personas a los que todos piden ayuda, pues saben que el está dispuesto a realizar cualquier empresa por riesgosa o difícil que sea. Pero nunca se lo dije cuando estábamos cerca. Ya que ahora suelo no ver a ninguno de los dos por meses... ¿años?

Cynthia, no puedo hablar de Ernesto y Jorge sin hablar de Cynthia. Ella es la mujer más joven que he conocido. Es decir, es la persona más joven que he conocido con un alma de niña y a la vez la madurez que muchos adultos envidiarían. Me enseñó a volver a confiar, me recordó lo que es estar bajo la lluvia, tener una razón para fumar un cigarrillo. A disfrutar de la estupidez de la vida. Y yo, yo quise ligármela. No funcionó y quedamos como amigos. Como aquellos amigos tan cercanos que nunca se ven por que él está demasiado ocupado. El día en que ella tuvo ese caso gravísimo con su exnovio… Yo no estuve con ella. El día en que mi mejor amigo cortó con ella por volver con su exnovia… Yo no estuve con ella. Cada vez que se ha peleado con su madre, por una u otra cosa. Yo no estuve con ella. El día que fue a visitarme a Guanajuato, que quería compartir tanto conmigo… Yo no estuve con ella. ¿Cynthia, cuantas veces te he fallado? Espero que no tantas como a Ernesto (por que con él he tenido más tiempo de lastimarlo).

¿Y mi familia? Creo que nadie o casi nadie lo ha notado, pero nunca hablo de mi papá, ni de mi mamá, ni de mi hermano. Se supone que los quiero tanto y sin embargo, nunca hablo de ellos. En lugar de presumirlos. Al doctor en ingeniería que siempre ha estado en la casa, que no se embriaga, que nunca nos golpeó, que siempre nos dio un techo donde dormir y siempre fue tan cariñoso con nosotros. Al ama de casa (además de maestra de tiempo completo) más amorosa que he conocido, que siempre ha estado en la casa por nosotros y dio todo por sus hijos. A pesar de haber estado cansada, a pesar de haber estado enferma, a pesar de haber estado fastidiada, siempre pude contar con ella. Y mi hermano, un ejemplo a seguir de nobleza y rectitud, siempre tan independiente, siempre tan fuerte, siempre responsable. Un día cuando yo sea grande me gustaría ser como él, trabajador, noble y tan… como él.

Y podría seguir así, hojas tras hojas acerca de las personas a las que he defraudado, lastimado y lo peor de todo, con las que he sido un Nazi quitándoles su felicidad. Siempre vi el otro lado de la moneda. Pensando en que yo soy un niño grande, una persona tan noble (a pesar de todo) y que la gente no se daba cuenta de eso, que las personas me lastimaban y que debería alejarme de ellas para no ser lastimado. Ahora me doy cuenta, que todo ha sido al revés. Que vi la paja en el ojo ajeno y nunca percibí las molestias por la viga en el mío. Sólo puedo decirles, que espero ustedes no tengan los mismos errores que yo, que se den cuenta antes de todo el daño que uno puede causar al niño interior de todos los que nos rodean. De toda la alegría que podemos robarnos por pensar que los demás “son demasiado felices”. Sólo espero que tú tengas más suerte que yo y sepas avivar esa llama, esa pureza en el corazón de las personas. Que seas como el hombre de la guitarra que a pesar de todo, siguió alegrando a la gente que lo rodeaba.

Nota: Para todas las personas que no mencioné, sólo puedo decirles que están en mi corazón. Que realmente, siguen en mi corazón y yo también seré como el hombre de la guitarra. A cantar, a bailar y tocar una canción que nos ilumine el corazón a cada uno de nosotros.

domingo, 20 de enero de 2008

Falta de inspiración

Mira que me mato toda la noche pensando

Algo para llenar este efímero espacio

Tengo tres lectores y uno que otro andando

¿Pero que quieres? Yo trabajo despacio

.

Un día quise ponerme horario de inspiración

Escribir de 12 a 8 sin ninguna vacilación

Pero no, yo escribo una vez por semana

Y en mi redacción mi talento emana

.

Alguna vez tuve una enamorada

Por eso dormía muy poco

Ahora son las 3 de la madrugada

Luego por que toy tan loco

.

No puedo evitarlo, soy nocturno

Como aquel a Rosario

Y es que de noche es mi turno

De rezar un novenario.

.

Por que he pecado lo confieso

Y también lo he disfrutado

Aunque no soy un obseso

A ti también te he recordado

.

Escribir cuatro renglones y unas rimas

Es más fácil si es de noche

Que si vas con amigos y unas primas

Manejando tú en tu coche

.

Además para justificar las rimas

Puedes decir cualquier palabra

No importa el tema que elijas

Es tan fácil como un abra cadabra

.

Pero escribo sin Ton ni Sonia

Para llenar un vacío absurdo

De los pecados de la colonia

Que llevo dentro en lo oculto.

.

Es que yo tengo secretos

De mis aventuras malsanas

Algunos están por escrito

Los otros entre mis sabanas

.

Mi vida no es sólo sexual

Y una que otra enamorada

Mi vida es muy espiritual

Cuando recibo una mamada

.

Extraño tus caderas, también tus ojos

Tus senos tan frescos por las mañanas

Extraño tus piernas tan bien torneadas

Y como dejabas mis labios tan rojos

.

Es que me gustaba lamerte

Saborear todos tus olores

Ahora no quiero perderte

Quedarme sin ilusiones

.

Te extraño y no lo niego

Pero tú tan olvidado me tienes

Bien merecido lo tengo

Por pedirte que te me entregues

.

Te amo no lo niego

Aún cuando estés con otro

Te amo y no importa

Quedarme siempre tan solo.

Amor es tiempo

Mi vida no se mide en tiempo, lo he dicho y los que me conocen ya lo saben. No puedo medirlo en horas, ni en días, ni demás. Mi tiempo no se mide así, por que no soy como todos. Mi tiempo se mide en amores, ciudades, tiempos y amigos. Recuerdo muy bien que hace mucho tiempo tuve un mejor amigo, que me compraba chucherías en el recreo, pero eso no es importante.

De lo que quiero hablar es de los amores ¿o acaso hay algo más grande en esta vida? Puede que sí, pero no hay algo tan significativo. Mira que yo he tenido amores, para ser un joven frustrado, de baja autoestima y sin un sex appeal muy notorio, he tenido bastantes mujeres. Claro la mayoría ha durado más poco que un estornudo a pero hay unos estornudos muy sabrosos. ¿De quien te cuento? Cómo todas las personas, tuve un amor de mi vida (si alguna persona no ha tenido a alguien así, pues debería apurarse).

Lo curioso no es tanto tener amores. Lo curioso es darse cuenta que ya pasaron. Mira que hace un rato, me moría de verás por no estar con ese amor de la vida. Pero luego vinieron otros. Unos buenos y otros malos, más bien todos malos muchos por mi culpa y algunos por culpa de ellas (¿para qué me dicen que sí si siempre no quieren? Karma).

Y ahora pienso en ello por que miro mis viejas cartas, los viejos escritos, las fotos de esas personas y ya no pasa lo mismo, es decir, sé lo que significaron, sé cuanto me movieron mi vida pero ahora ya no hacen nada. Pero no, eso no es lo más feo, lo más feo es ver el caso contrario. Cuando uno piensa que ya todo pasó, que ya todo desapareció y de repente te das cuenta que hace muy poco tiempo estabas enamorado de alguien y todavía no termina de salir.

O sea, lo que trato de decir es que me siento muy solo y a la vez es bastante cruel ver que tengo sentimientos agradables hacia personas de mi corto pasado. Por que ya no puedo estar con ellas, por la lejanía, por que no quieren estar conmigo.

En fin, con nuevos días nuevos amores y así seguirá mi tiempo girando. ¿Quién dice que el amor no es el motor de mi vida?

sábado, 19 de enero de 2008

¿De que van las nuevas etiquetas?

Pues en general la gente que ya me conoce de hace un ratito sabe que no me gusta implementar muchas cosas a mi blog, no le pongo cajas de música, ni videos, me tardé mucho en ponerle una cbox y si acaso tiene una imagen. La cuestión de esto es por que la ecofilia está planeada para ser leída. Mi meta es ser un escritor, no me interesan los videos o la música o las imágenes al grado que a la mayoría de la gente. Por eso este blog está dedicado única y casi exclusivamente a las letras. Pero ahora hay un cambio, por una parte metí una encuesta que es casi irrelevante, sobretodo por la cantidad de visitas que tiene este sitio, además de que la pregunta no es tan relevante como para cambiar lo que es la ecofilia en sí.

De lo que sí quiero hablar y es importante decirlo, es acerca de las nuevas etiquetas que acabo de implementar en cada uno de los escritos que hay en mi blog. Por una parte por que la idea es que sea más fácil localizar mis posts, tanto para mí como para las personas que visitan este blog. Por otro lado, para que las personas nuevas que lleguen a entrar a este blog se den cuenta de que va el asunto y puedan leer los escritos de una manera diferente es decir, que sí quieren leer sólo mis relatos tengan la opción de hacerlo directo y no estar leyendo de fecha por fecha.

En fin, el cambio ya está tomado, aunque sería interesante escuchar opiniones de mis lectores habituales. Por otro lado y para cortesía de ustedes, les explico de que trata cada etiqueta (por que los nombres no son tan fáciles de entender) así que veamos:

Basura interpersonal: Se trata de todos aquellos escritos que son demasiado personales como para incluirlos en alguna otra categoría. Esta etiqueta es muy buena si quieres entender un poco de lo que soy yo, Eco.

Relatos ecofílicos: Como algunos ya sabrán lo que yo más escribo son relatos, tanto eróticos como de otros tipos y como es fácil de inferir, en esta etiqueta estarán mis escritos que estén dedicados a los relatos cortos.

Confusión por el espiral: En general son relatos aunque pueden caer también minificciones o choros, la cosa es que en general son escritos que no son tan “fáciles” de entender, generalmente por su estructura. De eso trata esta etiqueta.

Síndrome de Abstinencia: La mayoría de las personas conocen esta “saga” que más bien siento que es un relato corto dividido en varias partes. Esta etiqueta esta dedicada exclusivamente a esta serie de relatos.

Algarabías: Yo siempre he dicho que no escribo poemas, por que no sé nada de métrica. Sin embargo esta etiqueta se trata de los escritos que por su estructura son lo más cercano a un poema libre.

Elucubración o simple verborrea: Aquí van los ensayos, que aunque no escribo muchos siempre pongo el mayor esmero en cada uno de ellos.

Amores de soledad: Curiosamente pensé que habría mayor cantidad de post aquí. Básicamente se trata de una serie de relatos que tuve un tiempo, donde la idea principal trataba de la soledad y todo lo que conlleva con ella.

Historias de la calle: Aquí van mis relatos de la calle, son relatos vulgares, populares y que a veces pecan de falta de tacto o de estilo garigoleado que muchos prefieren en mis otros aspectos.

Tutoriales: Aquí van los manuales que llegue a escribir. Probablemente la etiqueta que permanecerá más vacía.

Pues básicamente estás son las nuevas etiquetas del blog. Cada escrito ya tiene asignada al menos una de ellas y en el futuro todos los que escriba llevaran una de ellas. Tal vez en alguna ocasión haya algún post que entre en dos categorías pero trataré de evitar esa situación para una mejor lectura del blog (y la concordancia entre las entradas puestas en las etiquetas y las del archivo del blog). Pues básicamente esa fue la modificación hecha en este blog. Espero les guste.

Bebe

Era el día de mi presentación más importante, ya los boletos estaban vendidos y seguramente habría unas 5000 a 10000 personas, nada mal para una presentación amateur de ballet. La excitación se olía en el aire, además de los perfumes de las demás bailarinas, tengo que aceptarlo lo único que evitaba que mis piernas temblaran de la emoción era que tú estabas a mi lado, tomando fuertemente mi mano y besándome cada vez que estaba tan nerviosa que comenzaba a sonrojarme.

Empezó la función y salieron las demás bailarinas haciendo los pasos y coreografía de manera hermosa, la iluminación estaba perfecta y resaltaba más sus perfectos movimientos, lo que no evitaba que me pusiera cada vez más ansiosa por salir como ballerina principal, pero seguías a mi lado, serías mi pareja y luciríamos un verdadero amor sobre el escenario.

La emoción estaba presente en las gradas, pero eso era lo que menos me importaba, yo sólo estaba ahí por una sola persona, puedes decir que soy un “stoker”, un fanático que ha pasado de los límites y que no puede dejar de admirar a su artista favorita, pero tenía que verla, sobre el escenario, verla mover sus piernas mientras vuela por el cielo nuevamente.

Salimos al escenario y por fin supe lo que se sentía volar junto a ti, tener un orgasmo en medio del baile, enfrente de todas esas personas y saber que estoy con la persona indicada, ver que cada levantamiento, que cada gesto y cada paso son perfectos si estoy a tu lado, Te amo y sé que lo sabes y el público aplaude emocionado al terminar por que pueden ver nuestro amor transformado en arte.

Te adelantaste a la recepción para festejar la presentación por que querías sorprenderme con el anillo, mientras me dejaste en el camerino terminando de arreglarme, conseguí quedarme a solas, completamente a solas, para poder pensar y revivir cada momento de la presentación. Fue cuando tocaron a mi puerta…

Pude colarme detrás del escenario al terminar la función, tenía que decírtelo, tengo que aceptar que fue difícil pasar entre sobornos, piropos y ser una sombra en medio de ese mundo tan ajeno a mí, por fin llegue a donde debías estar, sólo espere que mi suerte siguiera viva cuando toqué a tu puerta. Abriste, me reconociste, tu cara revelaba preocupación, asombro y un poco de irritación, lo único que me quedó fue decirte que te amaba, y darte mi corazón, morí en ese instante cuando me besaste justo cuando los últimos latidos se tranquilizaban en verdad.

Había champaña, bocadillos y un servicio excelente, todos nos festejaban por cualquier parte, globos y demás decoraciones hacían más evidente el sentido de la noche, puedo decirte que me di cuenta perfectamente de lo que me tenías preparado, no supe si yo actuaría más sorprendida o lo harían el resto de los invitados, entre los que estaban mis padres y los tuyos. Cuando estábamos terminando de partir el pastel de festejo, ambos con el mismo cuchillo, sorpresivamente no soltaste mi mano, te hincaste a mi lado y me pediste casarme contigo, de inmediato respondí que sí, la emoción, el llanto y los festejos se hicieron notar a nuestro alrededor, pero todo eso fue superado cuando todos aclamaron por un beso, te acercaste, me besaste como nunca y cuando nos separamos tan sólo pudiste decir “tienes un saborcito raro”.

Idilio

¿Qué fue lo que pasó anoche? Me pregunto horas después de que mi café ya se ha enfriado, rascándome la cabeza en mi sillón, con un cigarrillo apagado en mi boca y el Sol entrando cada vez más fuerte en mi ventana. Tomé un libro, encendí mi computadora personal y puse un poco de música, aún así los recuerdos fluyen como una vieja película en un antiguo proyector cuya pantalla es mi cabeza.

Te recuerdo cuando tocaba suavemente tus delicadas piernas mientras te retorcías justo como hace veinte años, como tu cabello se enredaba en mi muñeca, mientras trataba de desabrochar tu estorboso brassier de encaje negro, y como con cada beso sentía que querías deshacerme de tal manera que…

Te mueves en la cama, girando tu cuerpo un poco, pero continuas con el abrazo, no sé si han pasado un par de minutos o varias horas, de cualquier manera la habitación está oscura y yo no puedo dormir con el remordimiento de esta noche.

Llegando a la fiesta miré todos los rostros familiares, algunos ya casi desconocidos, otros presentes, como el de Fabián quien era mi mejor amigo y se convirtió en mi socio, también estaba aquella mujer que en primer año me deslumbro con su inteligencia, ahora con su marido y contando anécdotas acerca de sus dos hijos. Me ofrecieron un trago, un cigarrillo y en ese momento te encontré, más bien me encontraste con la sonrisa pícara de quien descubre a alguien que trataba de fumar a escondidas, además de que sostenías tu encendedor en tu mano, justo como si hubieses estado esperándome.

Me tomo el café de golpe y me decido a tomar un baño, en la tina mis pensamientos siempre han sido más fluidos, me recuesto y pongo a correr el agua a una temperatura agradable, cuando esta apenas está llegando a cubrir mi pecho, yo ya me encuentro pensando en ti.

Estando en la barra te decides a contarme de tu vida profesional, como te ha ido con la vida, donde has vivido estos años, pero nada de tu vida personal, yo por mi parte te cuento de mi ex-esposa y de algunas amantes, de cómo me encuentro sólo por la vida en este momento, sin familia, sin aspiraciones más que tratar de lograr otro best seller, como hace dos años.

Te mueves demasiado sin dejarme arrancar tan fácilmente tus ligeros, pero eso es parte del juego, me recuerdas lo sé, incluso tu cuerpo me recuerda, se acomoda pasivamente debajo de mí, mientras tu finges una inocencia demasiado falsa para tu edad y a la vez tan interesante como redescubrir las selvas vírgenes que ya han sido exploradas, pero ya sólo quedan vagos recuerdos en lo profundo de la memoria.

Abres los ojos, miras de un lado a otro, me ignoras un par de segundos en los que probablemente el “¿Dónde estoy?” pasa por tu cabeza, te trato de dar la seguridad de estar en mi casa y abrazarte, pero rehuyes al contacto y todo lo que puedes repetir mientras te levantas de la cama es ¡Mi marido! Cuando te pones las bragas ¡Mi marido! Buscando tu bolsa ¡Mi marido! Viendo las llamadas perdidas a tu celular. Sólo atinas a besarme apresuradamente antes de salir por la puerta principal de mi casa, dejándome de nuevo completamente solo.

No puedo recordar que fue lo que desató todo, estábamos en la terraza del salon de fiestas, yo hice algún comentario sarcástico, reíste y creo que fue cuando nuestros ojos se encontraron, nos besamos como la primera vez y me dijiste: ¿recuerdas que era lo que nos gustaba hacer?

Salgo del baño, siento el hambre causada por la noche de juerga, cuando voy rumbo a la cocina con sólo mi bata suena el mensajero instantáneo con la clásica advertencia “tienes un email”, es tuyo, tienes una foto de tu lunar que tanto me gusta y sólo preguntas “¿crees que podríamos vernos de nuevo?”

Olores desodorante

Salí a la calle, cajetilla de cigarros en mano, encendedor en la otra, estaba dispuesto a encontrarte. Caminaba sin rumbo pero mis pasos acostumbrados a tus recorridos me llevaron directamente a “la canarita del tiempo”, el trovador en turno tocaba aquella canción que siempre me recuerda levemente a tu imagen. Propiamente instalado en una mesa ordené un café que cinco minutos después cambiaría por una cerveza. Fumaba ya el tercer cigarrillo cuando decidieron tocar tu canción, pero al no sentirte cerca salí del lugar para nuevamente entremezclarme con los comunes trausentes.

Dos cuadras más adelante un culobonito pasaba frente a una manada de ñiles, los cuales lanzaban toda clase de piropos desde sus fauces. Unos pasos más y una desafinada serenata de parte de un fulano bastante idiotizado hacía sonrojar incluso a la semidesnuda estatua a la cual se dedicaban sus idílicos cantos. Vi también a una mujer que tenía tu cintura, después de seguirla unos cuantos metros choqué de frente con nuestro primer nidito de amor, aquél hotel en el que cuando fuimos jóvenes…

No, Vamos déjate llevar, Es que no estoy lista para esto, Pero sabes que te amo, Yo también te amo, Ramiro, pero tengo miedo, Sabes que no va a pasar nada que tú no quieras, Es que… te amo…

Estuve a punto de entrar pero probablemente al encargado no le agradaría mucho que yo me interesara por un cuarto vacío. Además no tenía dinero para desperdiciar en pendejadas, sólo lo suficiente para mis cigarros y más cervezas.

Encaminé mis pasos hacia el jardín principal de la ciudad cuando me di cuenta de que llevaba más de veinte minutos con una colilla en mi mano y ningún cigarrillo en mi bolsillo. Una rápida visita en aquella farmacia me recordó esa ocasión cuando pasamos por dos paquetes de preservativos, unas frituras, un par de cervezas y aquellas pantis que a ti te habían parecido divinas.

Ya en el jardín encontré a un par de viejos amigos de mi adolescencia, fumamos un poco, discutimos acerca de lo poco que habíamos cambiado, de cuando sería nuestra próxima reunión y acerca de si seguía manteniendo relaciones contigo. Les dejé mis cigarros para cuando decidí volver a casa.

En la tienda todo era orden, tomé una Coca-Cola, un seis de cervezas, un paquete de Sico y sólo esperaba a que la señorita pechoslindosmeencantaríaestarcoalguiendetúedadperosólotengodiecisiete terminara de guardar todo en una bolsa para salir rumbo al departamento a sólo dos edificios de distancia.

Dentro seguía el mismo caso de nuestro último encuentro, la ropa interior arrojada por la sala, el sillón con esa mancha de vino a punto de secarse, las llaves perdidas debajo de la cómoda, la comida aún sobre la mesa, el hedor a sexo húmedo, viscoso y caliente en el aire y adornando toda la escena, tu cuerpo sobre mi cama aún desfallecido.

Deposité un beso en tu frente, al cual ni siquiera reaccionaste, tomé unas truzas limpias, mi toalla y pasé directamente al baño. Ahí puse a llenarse la tina mientras quedaba completamente desnudo, me arrojé al agua y corrí la cortina, cerré los ojos y por un instante, te sentí.

Asomé mi cabeza por el hueco entre la cortina y la pared para ver por la puerta abierta que seguías dormida. Cerré mis ojos nuevamente y me di cuenta que lo que sentía era tu olor que estaba junto a mí, tomé mi brazo y ahí estabas, en el otro, en mis piernas, en mi espalda, incluso en mis ojos. Me lavé por un lado, por el otro, detrás de las orejas y sobretodo en las partes que estuvieron dentro de ti, sólo para darme cuenta que a pesar de mis intentos todo tu olor estaba dentro de mi cuerpo, que lo que buscaba estaba ya dentro de mi habitación.

Salí de la bañera y me acerqué a ti, sonreías, me mirabas a los ojos y con esa expresión tuya entre excitada y divertida me dijiste:

“Mira, mi sexo huele a ti”

Bajé, lo respiré y ahí fue donde todo volvió a comenzar.

XXX

Te acercaste y me lamiste la mejilla, para ser la primera vez que me veías me pareció de lo más atrevido… $5000, me dijiste, fue todo lo que necesité.

Arañazos rápidos en las zonas apropiadas, pequeños mordiscos en mi lóbulo y mi cuello, perfectamente sentí tu mano en mi trasero mientras restregabas todo tu sudor por mi cuerpo. Me miraste a los ojos, quise besarte, tu mano me detuvo y me arrojó a la cama, mientras desabrochabas mi cierre yo comencé a perderme en las grietas tan evidentes del techo. Pusiste tus labios en el lugar correcto, pero para mi, todo estaba en el desierto, ese desierto que estaba consumiendo la poca pintura en el techo de este cuarto, dicho sea de paso de un hotel para el sexo, recordando, los tiempos en que yo también vivía en mi desierto interior. Al no reaccionar, te detienes un poco y me preguntas si todo va bien, recordándome que eres mía por otros cincuenta minutos, yo sólo consigo afirmar con la cabeza, mientras vuelvo a sumergirme en las visiones.

Otros cinco minutos cuando te hartaste de mi mutismo y al no ver ningún cambio en mi conducta, decidiste pasar a algo más, probablemente con el afán de sacarme más dinero. Pude percibir la sensación y el olor del látex, como subías tus faldas y te sentabas tranquilamente sobre mí. Pero no quería regresar aún, quería recordarla, sus formas, sus ojos, esas caderas poderosas, esos labios que levemente se parecían a los tuyos.

Irene, dije y me miraste raro, preguntaste que como sabía tu nombre, hasta en eso te parecías, pedí disculpas, olvidé que tú querías llamarte Viridiana. Por un momento dudaste en irte, te pedí que te quedaras, te ofrecí mi cartera y comencé a ser participe de la penetración. En verdad comencé a interactuar, perfectamente pude darme cuenta como te cerrabas un poco más, pero no de la manera falsa para causar una eyaculación rápida, no, lo querías de la manera sincera, de la forma en que se pide a un amante que llegue hasta tus entrañas. Perfectamente pude sentir como entraba un poco y un poco más, tus labios se abrieron, gritaste y me besaste. Las putas no besan.

Te giré en un movimiento brusco, justo cuando estabas debajo pude ver su mismo perfil, en ese preciso momento en que comenzaba a tocar tu pecho, como llamando al corazón. Todo sabe tan delicioso cuando es algo nuevo simulando ser añejo. Cuando sientes que a pesar de ser la primera vez, todo se acomoda perfectamente, como nuestros ombligos quedando a la misma altura, como si estuviéramos conectados.

Se acabo el tiempo, me dijiste, por favor quítate de encima, me repetiste, te dije que te amaba, tu cara mostró esa sorpresa de alguien que no entiende lo que sucede, cuando me entregué por completo, pude sentir como te retorciste en un pequeño movimiento, que lo dijo todo.

Un orgasmo.

Te di mi cartera, las llaves de mi auto, de principio ya sólo querías irte, te supliqué que lo tomaras, no entendiste nada, pero era buen dinero, solamente te despediste y saliste del cuarto. Me senté, encendí un cigarrillo, mientras tomaba un trago a mi botella. Ahora mi vida sería tuya y yo no tendría que volver al hotel.

jueves, 17 de enero de 2008

Abarijamelanokoytzotzoninshubiteria

Yo pasaba por aquí, para decirte como estás

Traía yo un secreto que sólo a ti te puedo contar

Lo he perdido en el camino y no lo puedo encontrar

Pero no te preocupes, un día tú lo sabrás

.

Mira que me gusta el pay, el pastel y el helado

También me encanta la noche con un cielo estrellado

Pero no me gustan esos ojotes que pones

Cuando recito mis simples composiciones

.

Que si no sé escribir

Que si no le echo ganas

Que si me importa

Que no sé decirte que sí

.

Pero mira que te presionas por algo tan simple

Como llenar un espacio con pequeñas grafías

Las letras son letras y lo sabroso de ellas

Es leerlas sin mayor sentido que la algarabía

.

O pero no me hagas caso

Yo soy sólo un baboso

Pero dirás que soy hermoso

Aunque ya soy un fracaso

.

En cuatro renglones escribo

En cuatro suspiros yo vivo

En cuatro quisiera pedirte que

En cuatro años te cases conmigo

.

Y dicen que la poesía, la estética, las bellas artes

Que lo glorioso, la pureza y que otras madres

Yo sólo te digo que para escribir sólo necesita

Escribir sin ton ni son, escribir como fuentecita

.

Chorrito tras chorrito sin preguntarte

¿De qué estoy llenando mi estanque?

Hay que escribir sin pensarlo

Como si uno viviera amando

.

Pero yo no tengo a quien amar dicen unos

Entonces ríete de la vida como los locos

Pero mira que no somos tan pocos

Los que podemos inflarnos tanto los humos

.

Por eso hay que ser humilde y al cielo mirar

Recordar que somos infinitamente pequeños

Como unos granos de arena a la orilla del mar

Pero entre todos la tierra solemos formar.

.

Pero no hagas caso de lo que te digo

Por que yo soy el loquito del templo

Una cosa soy honesto y te repito

Escribe con pasión y sin tiempo

El meme que me pasó setsuna

No respetaré las reglas por que a mí gusto el Meme no es más que otro tipo de SPAM (y he odiado las cadenas desde que inicié en internet, además a pesar de ser joven tengo el espíritu de un escritor anciano de chorrocientos años que le caga que le ordenen lo que tiene que hacer, aunque no escribo como uno, pero lo importante es empezar a creerse que uno es lo que quiere hacer para que el día menos pensado uno ya se ha convertido en eso que quiso. Eso es lo maravilloso de el pensamiento positivo. Aunque últimamente hay ya mucha gente que sólo piensa en negativo sin darse cuenta de cuanto daño se hace a sí misma al no creer en lo bonito de la vida. Me dirán supersticioso pero yo prefiero ser positivo mirar al cielo y dar gracias por seguir vivo) Pero aquí está el MEME Pues (aunque nadie me ha dicho lo que es un meme y la wikipedia no satisfizo mis inquietudes filológicas respecto al tema)

Ocho cosas que me hacen feliz.

1.- Tener a alguien a mi lado (de preferencia sonriendo).
2.- Saber que mi familia sigue "estable".
3.- Escribir con pasión.
4.- Mis amigos (en serio, sí tengo... algunos)
5.- Saber que hay gente que me lee, aunque sea de vez en cuando.
6.- Ver que hay personas que a pesar de los años me siguen hablando.
7.- Escuchar música que me gusta, sin importarme si alguien me mira y me pongo a bailar en medio de la calle o si la canto o si etc.
8.- Seguir vivo

Pues creo que eran ocho cosas, Weber puso 10... en fin

Se supone que le pase la bolita a otras ocho gentes, pero como no sé a quienes na más les digo que si lo quieren hacer (para tener una entrada más... como si el número de entradas fuera algo tan importante ¿ya voy a empezar?) es libro de hacerlo. Pues se lo recomiendo a la Zubba (escuba, escoba, socabon, succuba) al erick... y pues no sé quien más se pasea por aquí XD

en fin, ahí ta un Meme... (pues no está así muy sorprendente veda?)

Saludos a todos los del club de telechobbi

lunes, 14 de enero de 2008

¿Somos la generación X? Más bien Generación –

¿De qué chingados hablamos en todos los putos blogs?

Te quejas de todo. Que el puto pendejo que no se da cuenta cuanto lo quiero. Que si el nuevo videojuego para la consola novedosa es un asco. Que si la pinche gente común no usa su puto cerebro para pensar algo más. Que si la maldita religión nos maneja y trata de hacernos caer en una moral incorrecta. Que si nuestros padres no nos dejan ir de reven con nuestros cuates o ir a donde queremos. Que si ser parte de la blogosfera significa ser un niño pop de lo más comercial para sentirse importante.

Y seguimos quejándonos. Que el pinche país no avanza. Que el dinero no alcanza. Que todos nos miran con lástima. Que me deprimo a cada rato y sin ninguna razón. Que el pinche de Diosito nos mandó a este mundo para sufrir. Que ya no se puede confiar en nadie. Que todo el mundo se va a la mierda. Que, que, que… que chingados todo es pura mierda.

Y yo digo ¿y tú que pitos haces por cambiar al mundo?

Nos pasamos el día quejándonos (es bueno desahogarse, más no hundirse en ello) de todo. Pero no hacemos nada para cambiarlo. Nos quejamos cuando nos hacen una mamada y yo digo ¿Cuántas historias he leído/escuchado de gente orgullosa por que pasó a joderse a otra persona? Muchas. La misma persona que ayer digo “pinche culero me uso y sólo se acostó conmigo” al día siguiente aparece diciendo “je je, agarre a un pendejito na más pa quitarme la calentura”.

¿Qué nos queda por hacer? Pues no dejarnos vencer por los demás. Hay tanta cultura popular que nos dice que debemos de joder antes de que nos jodan o por lo menos joder al que nos jodió ¿Y luego de eso? Quedaremos en un ciclo sin fin donde nos pasamos chingándonos la vida.

Pues no señores. Yo sé que aún queda esperanza, aún habemos algunos que queremos un cambio. Así que simplemente te pido, que el día de mañana cuando alguien te haga una chingadera… sonrías y recuerdes que el mundo aún puede ser un lugar mejor.

Adios al pensamiento negativo. Sigamos adelante, CAMBIEMOS EL MUNDO CON UNA SONRISA.

miércoles, 9 de enero de 2008

Trucos de ancianos

Por favor, enséñeme maestro.

¿Y qué es lo que quieres saber de mí?

Todo lo que usted conoce, los secretos de la naturaleza, del hombre y de la vida.

Dime joven, exactamente a que secretos te refieres.

Usted lo sabe, todo lo que necesito conocer para ser un gran maestro en esta vida.

Entonces tú quieres poder convertir el plomo en oro, vivir por más de 100 años, dominar a los elementos, predecir el futuro ¿a esa clase de secretos te refieres?

Sí, quisiera poder conocer todo eso. Tómeme como su discípulo y estará seguro de que en poco tiempo lograré dominar esas artes, créame realmente estoy dispuesto a aprender lo que usted pueda enseñarme.

Esta bien hijo, Si realmente quieres aprender todo eso sólo hay una cosa que yo puedo enseñarte.

¿Y cual es esa maestro?

Que mires a tu alrededor un poco y dejes de buscar la respuesta en otras personas.

Pero maestro ya lo he hecho solo…

¿Y alguna vez has podido tomar un poco de fuego entre tus manos desnudas?

No maestro, eso es imposible.

Claro, será imposible si eso es lo que quieres que sea.

Maestro no entiende, yo quiero aprender de usted…

Puedes tratar de aprender de mí, pero entonces no aprehenderás nada. ¿Sabes como se aprende a crear?

No, no lo sé.

Creando. No conseguirás nada hasta que no lo intentes. ¿Quieres poder volar como el ave hacia el horizonte? ¿Quieres hablar con los espíritus? ¿Quieres saber los secretos de los antiguos maestros? Pues te diré el segundo y último consejo que puedo darte.

¿Cuál es ese consejo maestro?

Si quieres realizar algo, ve e inténtalo. Sólo se necesita un grano de mostaza para lograr lo que en verdad desees.

sábado, 5 de enero de 2008

¿Qué te digo?

No me duele que no estés, sólo me duele recordarte. Tus palabras me hirieron, no sé, no quiero que realices mis sueños. Simplemente quería quererte pero ahora eso no tiene sentido. Soy un pendejo, pero un pendejo noble, un pendejo fiel, un pendejo con sentimientos que no quiere que lo ames, simplemente no quiere que lo hagas sufrir. Y yo ¿Cuándo te he pedido algo? Al menos todo ha sido “en broma” bien sabes que sólo he tratado de quererte y hacerte feliz. Y aún así, haces comentarios hirientes, yo sé, no te sientes mal por ello, pero hay una diferencia básica entre no sentir realmente la necesidad de portarte bien con una persona y realizar actos imprudentes que bien sabes que pueden lastimarla. En fin, ¿Qué te digo? Esto no es una carta de despedida, por que al parecer siempre volvemos, yo por mi parte estoy que me las trago por no querer hablarte, pero hasta un pendejo como yo sabe que no quiere volver a ser lastimado, una y otra y otra y otra vez. Antes por lo menos pedías perdón. ¿Qué yo empecé? Lo sé, pero créeme este no es un juego de niños donde la culpa la tiene el que inicia, yo desde hace tiempo que he cambiado y tú sigues mirándome igual, hacia abajo, como si valiera menos. Luego me preguntas ¿Por qué estás deprimido? Si a cada momento se te olvida que sólo me haces sentir más mal conmigo mismo. Pero claro, el pendejo soy yo por hacerle caso a tus palabras. No me queda más que decidir entre dejar de navegar con mi bandera de “tengoelcorazónabiertoypuedeslastimarme” o seguir alejado de ti para evitar ciertos accidentes, perdón incidentes (olvidé por un segundo que tus ataques sí eran intencionados) Así que ¿qué te digo? Pues que discúlpame cuando sea tan sincero para decirte que he llorado por que me acuerdo de ti, en verdad no quiero causar lástimas, simplemente soy sincero. En fin, eso era algo que te gustaba de mí. Pero ya no importa. Últimamente ya nada importa.

Feliz año nuevo ¿vale? Perdona que me tardara tanto en decírtelo.

viernes, 4 de enero de 2008

Roller Coaster

Todo comienza en la taquilla con tus amigos y primos, donde se compran 5 boletos para subir a la atracción. Se pasa a la fila y puedes ver a un montón de pubertos ansiosos, una que otra chavita que en un par de años será una mujer ideal y en general una fila de gente que espera exactamente lo mismo que tú, subirse a un juego mecánico. Todo el grupo está emocionado sin notar que probablemente alguien tenga que irse solo, ya que el juego sólo tiene cabinas pares, es decir, para dos personas. Lo deciden a la suerte, a tu primo el pequeño le toca solo, no él no puede ir así, por lo que voluntariamente te ofreces en sacrificio ¿Quién sabe? Igual y te toca compartir con una linda chica. El juego se detiene y bajan las personas que estaban en él, es el turno de tu grupo. Todos se acercan y el encargado los va designando, unos en la 7, otros en la 8, puedes escuchar cuando le pregunta a una chica y ella le responde que va sola, lo cual es perfecto pues puede que te toque junto a ella. Tus primos y amigos se van a sus lugares y a ti te toca en la 6, del lado opuesto donde se fue aquella chica. No importa, alguien más subirá… Pero no, nadie sube y comienzan a asegurar cada uno de las cabinas para comenzar el juego. Bien otra vez solo. El juego no tardará en comenzar y a pesar de haberte subido tantas veces al “Chaos” sientes esos nervios iniciales, es decir, corporalmente se siente horrible. Pero es parte de la emoción y el juego mecánico comienza a moverse, sientes como giras cada vez más rápido, como tu cabina se bambolea hacia delante y hacia atrás, combinado con el movimiento oscilatorio del juego, además de que ahora te inclina y puedes sentir como en un momento estás a gran altura y al siguiente casi te sientes chocar con el suelo. Para una persona normal esto sería estimulante y tendría miedo o estaría lleno de adrenalina. Entonces es cuando te pega ¿qué sentido tiene todo esto? La cabina es para dos personas, por que precisamente esta clase de emoción es algo que se tiene que compartir. Y ahí estás evocando todas las veces que estuviste en una situación igual, en un parque de diversiones, en otro, y siempre, invariablemente te toca subirte solo a los juegos mecánicos. ¿Qué sentido tiene estar en una de las cosas más emocionantes de tu vida si no tienes con quien compartirlo? Y la depresión no se hace esperar. Puedes sentir los giros, las vueltas y mirar todo tu mundo moverse y aún así, no reaccionas. Puedes escuchar los gritos, ver la gente que se reúne alrededor de la atracción pensando en que probablemente a ellos les daría demasiado miedo estar donde estás ahora. Estás en una de las situaciones donde es prácticamente imposible pensar. Y ahí estás, pensando en que probablemente eres la única persona del mundo capaz de deprimirse en una montaña rusa. El resto es darle vueltas a la misma idea ¿cómo alguien es capaz de deprimirse en una atracción mecánica? Pero eso ya no importa, ya te estás alejando junto a tu grupo de amigos y familiares que piensan en cual será el siguiente juego al que subirán y claro, escuchas como todos comentan que te morías tanto de miedo que no quieres contestarles cuando te preguntan “¿Y como se siente subirte al Chaos?”